jueves, 3 de noviembre de 2011

La Sociedad En Mesopotamia

En Mesopotamia la autoridad máxima era la del rey, a quién se suponía de origen divino, es decir se pensaba que provenía de los dioses, de los cuales recibía su poder. El rey debía ocupar el rol de representante de los dioses en la tierra, y por ello era el primer sacerdote del imperio; además, el rey era el jefe del ejército y del aparato administrativo. Para realizar sus funciones se rodeaba con una serie de consejeros que lo secundaban. Por debajo de la autoridad del rey se ubicaba un grupo de dirigentes locales que ocupaban cargos administrativos; se repartían entre los ancianos de las ciudades. Estos consejos de ancianos eran los encargados de poner en práctica el código de Hammurabi, que se utilizaba para reglamentar la justicia, la repartición de la tierra y para procurar el bienestar del pueblo.
La sociedad mesopotámica se dividía en tres grupos sociales claramente diferenciados: la aristocracia, los hombres libres y los esclavos.
La aristocracia
La Aristocracia estaba formada por cierta cantidad de familias ricas y poderosas que desempeñaban importantes cargos de mando en el ejército y en la religión; todos formaban parte de la familia del rey. Consejeros del rey, sacerdotes, comandantes militares y embajadores componían este grupo.

Hombres Libres

Los hombres libres eran los que trabajaban en la ciudad; eran funcionarios del aparato de Estado que controlaba a la mayor parte de la población y cumplían labores especializadas en las grandes obras públicas como los sistemas hidráulicos de regadío o la construcción de monumentos religiosos. Ingenieros, arquitectos, escribas, guerreros, artesanos y alfareros componían este grupo.

Esclavos

Los esclavos no tenían derecho alguno y eran propiedad tanto del Estado como de los ciudadanos ricos. Estaban conformados por los prisioneros de guerra y por los ciudadanos pobres que debían venderse a si mismos junto a sus familias para pagar sus deudas.